Si tienen diccionarios en su casa, busquen la palabra imposible y cuando la encuentren tachenla, borrenla, recortenla, sea como sea eliminemos esa palabra de nuestros diccionarios y de nuestras mentes. Si tienen hijos pequeños no le enseñen esa palabra, porque lo imposible realmente no existe. Todo es posible con voluntad y cuando se tiene DESEO INTENSO, así que digámonos a nostros mismos que no hay nada imposible, y no dejemos que nuestra mente limite nuestra vida. Si existe la cura al problema, claro que la hay y esta en nosotros mismos no la busquemos en el exterior porque la respuesta yace en cada rincon de nuestra mente. Cambiemos esa forma de pensar.
Gustavo A.
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